La Muerte de Gadafi cierra la conquista de África
EEUU se asegura el control de los recursos naturales y su presencia en la orilla sur del Mediterráneo
Por: Kike Gómez.
Muamar el Gadafi ha muerto sin que tengamos muy claro todavía, quienes fueron los rebeldes que iniciaron el golpe de estado que desencadenó la guerra de Libia hace ocho meses.
A pesar de ello, lo cierto es que la guerra ha terminado después de casi 26.000 salidas de aviones de la OTAN (Francia y Gran Bretaña principalmente), de las que 10.000 programadas fueron para bombardear posiciones gadafistas en un intento por «democratizar» la zona. El eurodiputado de Izquierda Unida y vicepresidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo, Willy Meyer, deja clara su posición respecto a esas cifras:
«El objetivo de la actuación de la OTAN durante todo el conflicto no era proteger a la sociedad civil, sino convertirse en la fuerza aérea de los rebeldes para aniquilar físicamente a los llamados «leales» y al propio Gadafi».
Uno de esos últimos bombardeos acabó, presumiblemente, con la vida del ex dirigente libio al atacar el convoy en el que viajaba, dando por finalizado el periodo de su régimen que se alargaba ya a 42 años.
«Con la ejecución de Gadafi culmina la apuesta militarista de los países miembros de la OTAN para garantizar el control de los recursos naturales y poder tener presencia de los Estados Unidos en la orilla sur del mediterráneo, mediante el despliegue del AFRICOM (el Comando Unificado Combatiente del Departamento de Defensa de EEUU en África)» indicó Meyer.
El europarlamentario de IU hizo las veces de portavoz de su partido declarando que «desde Izquierda Unida condenamos claramente esta actuación, que tenía la clara finalidad de acabar con la vida de Gadafi para evitar que fuera sentado en un banquillo y declarara ante tribunales internacionales».
AFRICOM
Vivimos en un mundo complejo donde cada vez aparecen más conflictos en lugares diferentes, pero estratégicamente importantes (Petróleo, Gas, Agua, opio…) disfrazados de buenas intenciones por parte de las potencias occidentales, para acabar con sanguinarios dictadores o grupos terroristas peligrosos (Sadam Hussein, los talibanes…). Los rebeldes libios son los últimos de una larga lista de hombres o grupos entrenados por los ejércitos de la OTAN o los EEUU en particular, para sembrar el caos en los países propietarios de la materia prima en cuestión. Grupos a los que después abandonan y criminalizan como si ellos no tuvieran nada que ver.
Mahdi Darius Nazemroaya y Julien Teil afirman en un artículo titulado: America’s Conquest of Africa: The Role of France and Israel, que esta estrategia deliberada utilizada por Estados Unidos y sus aliados para abrir las puertas hacia el continente africano por medio de expandir la denominada “Guerra global contra el terrorismo” servirá para «expandir la presencia estadounidense en el continente africano y también justificará la creación del AFRICOMdel Pentágono, pensado para controlar África por medio de la creación de una versión Africana de la OTAN como un medio de ocupar África para Washington».
A finales del siglo XIX los países europeos, se repartieron África en la Conferencia de Berlín, creando grandes imperios. En los años 50-60 del siglo pasado comenzó la descolonización dejando en bandeja a las nuevas potencias (EEUU-China, principalmente), la lucha por ese diamante en bruto.
El caso de Libia es un claro ejemplo de los conflictos que están por llegar.
La astilla 